María Jesus Hernández, conocida bajo el pseudónimo de Chus, reside en Málaga, España.
Aficionada de la lectura, encontró su inspiración en Gloria Fuentes, a quién tomó como guía para comenzar a escribir sus versos.
Tras un período alejada de la escritura, Chus vuelve a incursionar en la escritura, considerándose “una aprendiz y solo me asomo al balcón de las letras”
Surcar un mar de dudas
Surco un mar de dudas
golpeando la culpa
cual ola embravecida
sobre los confines de mi piel,
un dolor que no mitiga
Me rompo en los kilómetros
que me separan de ti,
ahogándome en mis océanos,
son duros los envites
que causan mi desazón.
Reloj de arena que porta
una cautiva vida efímera,
es pasajera nostálgica
navegando en los mares
de heridas no sanadas.
Sumergida entre pesares
me pellizca la soledad
dudo de mi existir
pesan las lágrimas
bate un solo corazón.
Ella es así, es MUJER
Es luz insaciable
habitando el firmamento,
ansía los brillos
que la luna cobija
y canta en las frías noches,
con sus manos
empuja los océanos
que el colchón mece.
Sus rasgadas rodillas
no le impide seguir
dibujando sonrisas
mientras levanta el puño
abanderando la lucha
que aparta miedo y dolor,
su herramienta es
la música del amor.
No hay bestia indomable
que quiebre su vida
porque entre cielo y suelo
armónicamente se erige
creando vida y
mantiene la mecha encendida.
Ella es así, es MUJER.
Si yo levantara la cabeza
En cada despertar
levanto un mundo
de paralelos inquietos
de febriles coordenadas
y lamentos etiquetados.
Y por momentos
finjo sobre un plano
usando máscaras y filtros
animando ilusiones
en diminutas dimensiones.
No cejo en mi empeño
y busco entre otros muros
placeres conectados
de absurdas realidades
por las que me desvivo.
Me emociono
cuando navego por mares
que sortean olas de historias
por lograr corazones
y alguna que otra mención.
Pero,
si yo levantara la cabeza
me subiría a un tren de emociones
que espera en el andén de la vida.
Yace en mi un amor latente
pobre corazón vencido,
fue un rumor
apagado e inexistente
un eclipse sin sentido
ni valor.
Con el paso de los los días
este quiso despertar
sacudiendo
con fuerza las ganas mías
en delirio pide amar
mi ansia prendo.
Copla de pie quebrado/Copla manriqueña
Me pregunto
Llegado a este momento
me pregunto quién soy.
Cómo expresar lo que siento
cómo construir palabras
que procuren la luz
en el ocaso perdido
y con la noche apagada.
Me subiría a una escalera
para abrazar la luna
y encender las estrellas
por iluminar sus ojos,
así vería su sonrisa
bajo la sombra de la luna
antes que los segundos colapsen
y los minutos se evaporen.
Evitaría que su mirada se ahogue
y no dudaría en sembrar esperanza
retirar las pesadas lágrimas
abonar y recoger su amor.
Versaría sobre su piel
y tatuaría cantos de vida
dibujando sobre las líneas
un amor infinito declamado
a los cuatro vientos.
¿Soy yo poeta?
¿ O sólo soy un sentimiento?